El establecimiento formal del negocio de venta de libros en Perú: los casos de Juan Jiménez del Río, Pedro Durango de Espinosa y Andrés de Hornillos (1580-1620)
Resumen
Desde 1543, hubo presencia de libreros en el Perú. Sin embargo, recién a partir de la década de 1580 este negocio se formalizó y la presencia de este tipo de comerciantes aumentó en la capital del virreinato. Este proceso fue impulsado por algunas razones; por un lado, el logro de la pacificación, el ordenamiento administrativo y el posicionamiento económico del virreinato hicieron que el territorio fuera atractivo para emprender aventuras comerciales diversas, como la venta de libros. Por otro, las disposiciones del Concilio de Trento y el III Concilio de Lima, que determinaron la obligatoriedad de ciertos textos para el clero, hicieron que apareciera un importante mercado de personas que necesitaban libros en el Perú. Asimismo, en el virreinato ya existían instituciones educativas y personal a cargo de la administración colonial, quienes necesitaban surtirse de ediciones provenientes de Europa. En ese sentido, la finalidad de este artículo es explicar el proceso de formalización del negocio de venta de libros en el Perú entre 1580 y 1620. Para ello, se ha realizado el estudio de tres casos de libreros españoles que ejercieron dicho oficio en Lima durante este periodo: Juan Jiménez del Río, Pedro Durango de Espinosa y Andrés de Hornillos.