Las comisarías del Santo Oficio en la Audiencia de Filipinas. Conflictividad y comunicaciones en un espacio inquisitorial periférico, 1583-1784
Resumen
Las enormes distancias geográficas y la lentitud en las comunicaciones entre México y las Filipinas constituían un problema en la provisión de oficios. De ahí que, desde el siglo XVI hasta el siglo XVIII, hubo varios intentos por establecer un tribunal del Santo Oficio en Manila que al final no prosperaron. Con el objetivo de subsanar todos estos inconvenientes, el tribunal inquisitorial de México implementó una serie de medidas. La primera consistió en otorgar una concesión especial a la comisaría de Manila para poder aplicar sentencias en delitos menores. La segunda fue establecer una división territorial de las comisarías diocesanas con la finalidad de ampliar su presencia a la mayoría de las poblaciones de las islas. Por último, el nombramiento simultáneo de tres comisarios que pudieran sustituir en cualquier momento al propietario en caso de ausencia.