La fuente escrita como elemento corroborativo de los cambios fónicos: evidencia onomástica
Resumen
La etimología científica, en contraposición a la ingenua o a la puramente impresionista, encuentra su más sólido respaldo en la lingüística histórica; y, en esta, en su conquista de la regularidad del cambio fonético. Y es que en virtud de dicho atributo el investigador, en este caso el etimólogo, puede no solo dar con el étimo de un término del cual no estaba seguro, sino que, apoyado en la regularidad del cambio, puede predecirlo, sobreponiéndose incluso ante la ausencia del corpus corroborativo disponible a la mano. El material confirmativo de una proyección etimológica puede encontrarse, sea con el descubrimiento de formas dialectales novedosas no entrevistas previamente o también en virtud de la evidencia insospechada aportada por el registro escrito filológicamente interpretado. La presente exposición procede en el siguiente orden: luego de una introducción general sobre el desarrollo de la lingüística histórica en el área andina, centramos nuestra discusión en el cambio fónico regular y su carácter predictivo en los estudios de lingüística andina con evidencias corroborativas tanto de naturaleza dialectal como documental (impresa), para luego, en una cuarta instancia, aportar testimonio manuscrito novedoso y revelador. La evidencia documental impresa o inédita gira en torno a la etimología de términos onomásticos como el de <Inca>, título nobiliario, y el de <Yauyos>, un etnotopónimo.